La otra mujer era bajita, de piel color ámbar cálido y pelo oscuro y apretado. La reconocí como la mujer que había intentado ayudarme en la feria de artesanía."Hola, Estelle", dijo la extraña mujer. Le sonreí y le tendí la mano. "Hola", le dije. "No nos conocemos, ¿verdad?" Puso cara de sorpresa,
*Gabe* El alivio de tener a Estelle de vuelta duró poco. No estaba más cerca de encontrar a la persona responsable de los rumores sobre ella, y ver el moratón lívido en su costado estaba en el primer plano de mi mente. Debía de ser doloroso. No entendía por qué insistía en que no lo había sido. Re
"Se conocieran como se conocieran, me alegro", dije. "Yo también, porque necesito hablar contigo y no me atrevería a intentar apartarte de ella". Val me sonrió con complicidad y yo me encogí de hombros. No era culpa mía si alguien lo había oído. Estelle era la que gritaba, lo cual no dejaba de sat
*Estelle* Debería haber hablado de Isolda hace una semana. Si lo hubiera hecho, Gabe no me habría enviado con ella para que aprendiera las responsabilidades de ser una Luna. Había querido protestar, pero Gabe estaba tan preocupado por la fiesta que se avecinaba que no quise disgustarlo. Las cosas h
"Hay muchas formas de definir la familia", dije. Isolde se burló antes de poder contenerse e intentó disimularlo con una tos. "¿Estás bien?" Le pregunté. Cuando la miré, me fulminó con la mirada. "Bien. Ahora iremos a la escuela", dijo Isolda. "Conocer a los pequeños de la manada es increíblemente
*Estelle*Estaba en lo cierto. Me había llamado después de, lo que sólo podía suponer, una reunión muy tensa con Charles, sólo que no parecía enfadado. No parecía nada, la verdad."Explícame por qué pegaste ayer a Isolda", dijo Gabe, frotándose las sienes como si yo fuera un niño al que estuviera re
Charles parecía extrañamente tranquilo cuando me acerqué. Tenía una copa en la mano y la levantó en señal de saludo a Gabe antes de alejarse. No pude evitar moverme nerviosamente. "No es nada, sólo estás saludando". No me miraba mientras hablaba. Estaba escudriñando a la multitud. Me pareció extrañ
*Estelle* Conseguí contener las lágrimas hasta que llegué a casa. Justo cuando creía que las cosas iban mejor, Charles tuvo que ir y decir algo tan horrible. Debía de ser su forma de vengarse por la nariz rota de Isolda. Una parte de mí deseaba haberle pegado yo también. Cuando llegué al dormitori